Hacia el ideal (fragmento)
V
Me asomé a tus pupilas, donde nada El húmedo esplendor de las turquesas, Y una nube preñada de promesas Obscureció el cristal de tu mirada. Sonreía tu boca, más rosada, Más dulce que la pulpa de las fresas, Y entumidas y torpes de estar presas Mis ansias escapáronse en parvadas. Ocultando a mi vista su misterio, Despedía su lúbrico sahumerio Tu carne, satinada como el raso, Y cuando al fin miré tus perfecciones, Combándose mi anhelo como un vaso Recibió la primicia de tus dones.
De Cuarzos
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