Nocturno sueño
a Jules Supervielle
Abría las salas profundas el sueño y voces delgadas corrientes de aire entraban Del barco del cielo del papel pautado caía la escala por donde mi cuerpo bajaba El cielo en el suelo como en un espejo la calle azogada dobló mis palabras Me robó mi sombra la sombra cerrada Quieto de silencio oí que mis pasos pasaban El frío de acero a mi mano ciega armó con su daga Para darme muerte la muerte esperaba Y al doblar la esquina un segundo largo mi mano acerada encontró mi espalda Sin gota de sangre sin ruido ni peso a mis pies clavados vino a dar mi cuerpo Lo tomé en los brazos lo llevé a mi lecho Cerraba las alas profundas el sueño
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