Algunas palabras que, hasta ahora, me estaban misteriosamente prohibidas
a André Breton
La palabra cementerio A los otros de soñar con un cementerio ardiente La palabra casita Se la encuentra a menudo En los avisos de los periódicos en las canciones Tiene arrugas es un viejo disfrazado Tiene un dedal en el dedo es un papagayo maduro Petróleo Conocido por ejemplos preciosos En las manos de los incendios Neurastenia una palabra que no tiene afrenta Una sombra de casís entre dos ojos parecidos La palabra criolla toda de corcho sobre raso La palabra bañadera que es arrastrada Por caballos perfectos más feos que muletas Bajo la lámpara esta noche glorieta es un nombre Y domina un espejo donde se inmoviliza Hiladora palabra que se derrite hamaca vid saqueada Olivo chimenea con tambor de resplandores El teclado de los rebaños se apaga en la llanura Fortaleza malicia vana Venenoso telón de caoba Velador mueca elástica Hacha error jugado a los dados Vocal timbre inmenso Sollozo de estaño risa de buena tierra La palabra gatillo estupro luminoso Efímera el azur en las venas La palabra bólido geranio en la ventana abierta Sobre un corazón batiente La palabra contextura bloque de marfil Pan petrificado plumas mojadas La palabra frustrar alcohol marchito Pasillo sin puertas muerte lírica La palabra muchacho como un islote Mirtilla lava galón cigarro Letargo azulina circo fusión Cuántas quedan de esas palabras Que no me conducían a nada Palabras maravillosas como las otras Oh imperio mío de hombre Palabras que escribo aquí Contra toda evidencia Con la gran preocupación De decir todo
Paul Eluard
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