Calma Avisos
Calma
Este silencio, blanco, ilimitado, este silencio del mar tranquilo, inmóvil, que de pronto rompen los leves caracoles por un impulso de la calma, ¿se extiende acaso de la tarde a la noche, se remansa tal vez por la arenilla de fuego, la infinita playa desierta, de manera que no acaba, quizás, este silencio, nunca?
Avisos
En este jueves décimo y tranquilo del clarísimo mes, descubres nuevas señales y prodigios nuevos de la humedad en la pared. Que ya no son fiestas ni son misterios sino materia de estupor: el joven ama el ruido de la muerte pero el viejo teme su olor.
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