Tormenta
Nuestro viento furioso grita a través de palmas gigantes sordos bramidos bajan del cielo incendiado con lenguas de leopardos nuestro viento furioso cae de lo alto El golpe de su cuerpo sacude las raíces de los grandes árboles salen del suelo los escarabajos las serpientes machos. Nuestro viento furioso sigue su camino mojado es el jugo oscuro de la tarde que beben los toros salvajes es el castigador campo. Los hombres oyen en silencio los gemidos del aire con el alma quebrada, el cuerpo en alto los pies y la cara de barro. Las indias jóvenes salen al patio, rompen sus camisas ofrecen al viento sus senos desnudos, que él se encarga de afilar como volcanes.
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