Coda Primera-Tristes
Ya las muchachas recogen, alegremente, las amapolas silvestres. Las praderas se empellejan de colores, y el pájaro bullanguero canta la primavera. La tijereta teje bajo los horcones la tibia modorra de su nido. La hierba, hasta ayer escondida, asoma, empuja fuera de la tierra su delicada ceja.
oiméne tajy poty, pe cerro ompoytambáva
En el parral del patio un brote apunta fuera del sarmiento; pero la viña está lejos de estas orillas. Allá donde crece un árbol el ramaje se hincha; esos árboles están lejos de estos parajes.
Aquí sólo contemplo los restos de la nieve, el lago de endurecidas aguas.
oiméne hy 'akuâ porâ opárupi ka 'aguy.
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