Por principio
Ya es tiempo de que vuelvan todas tus palabras las que el olvido ha perdonado las que sobreviven al puño del amor las sonámbulas guías bajo los párpados las mendigas que esperan tras la puerta las fieles a los sótanos del alma Remueve escombros y gusanos límpiales el rostro de lunas empolvadas de niñas traviesas en la noche de San Juan Arráncalas del fondo de ese armario apuéstales el silencio de las bestias tus ojos bautizados con los ácidos que digan eso poco que te queda bajo la podredumbre de tu máscara Se acabó el tiempo de pudrirse libremente de acariciar los lomos de la tranquilidad los ojos tras las rejas tras los actos La inocencia es un pedazo de carne que se pudre en la jaula de las fieras.
Del libro inédito Bajo llave
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