La culpa fue de aquel maldito tango
Estaba bien es decir menos peor adán dormido como si mi cementerial olvido perezosamente estableciera una geometría del azar y algún carajo pone de pura gana un disco causa o casi de que recaiga en zonzo memorioso de que me venga esa venganza latifundia de querer que la quieran demasiado a la que se desbisagró de mí sin saber cómo y prefirió que hiciéramos el amor por correo y no quiso seguir siendo la quién sabe tal vez hubiera sido la sola la ella destinal y aunque sé que este tango durará toda la vida ya habrá tiempo esta noche u otro siglo para volver al anti-edipo la lingüística los quásares o la sociedad ondulatoria como la física de planck
(De Prepoemas en postespañol)
|