La vida con un agujero
Cuando echo la cabeza para atrás y aúllo, La gente (más bien las mujeres) dice(n) Pero si siempre has hecho tu voluntad, Siempre te has salido con la tuya, Una inversión perfectamente vil Y mezquina de lo que ha ocurrido. Lo que las pobres tontas quieren decir Es que nunca he hecho lo que no.
Entonces, el tipo de aquel viejo palacete Que cumple con sus quinientas palabras Y se la pasa el resto del día Entre chapuzones y tragos y pájaros Está tan lejos como siempre, pero también Lo está el pobre maestrucho de anteojos (Seis chamacos, la mujer embarazada Y sus padres que vienen de visita)...
La vida es una inmóvil y cerrada lucha De tres manos entre los deseos propios, Los del mundo acerca de uno y (peor aún) La invencible y lenta máquina Que trae lo que uno habrá de recibir. Reprimidas, Viven en tensión en torno a la sangre ya estancada Del deber, el temor, el rostro ajeno. Los días se ciernen por ahí constantemente. Los años.
Poetry Book Society Supplement 8 de agosto de 1974 (Navidad de 1974)
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